Periodista ruso detenido y acusado por sus críticas a la guerra
Las autoridades rusas detuvieron a una ex periodista de la televisión estatal que renunció tras hacer una protesta en antena contra la guerra de Moscú en Ucrania y la acusaron el miércoles de difundir información falsa sobre las fuerzas armadas rusas, según su abogado.
Marina Ovsyannikova fue acusada por una protesta que realizó el mes pasado, con una pancarta que decía “(el presidente ruso Vladimir) Putin es un asesino, sus soldados son fascistas. 352 niños han sido asesinados (en Ucrania). ¿Cuántos niños más deben morir para que se detenga?”.
Si es juzgada y condenada, Ovsyannikova se enfrenta a hasta 10 años de prisión en virtud de una nueva ley que penaliza las declaraciones contra el ejército y que fue promulgada poco después de que las tropas rusas entraran en Ucrania, dijo su abogado, Dmitry Zakhvatov, en un post de Telegram.
El domicilio de Ovsyannikova fue allanado el miércoles y se la llevaron para interrogarla. Zakhvatov dijo que la ex productora del Canal Uno, financiado por el Estado ruso, pasaría la noche en una celda de detención en la sede de la policía de Moscú.
Ovsyannikova saltó a los titulares internacionales el 14 de marzo, cuando apareció detrás del presentador de un telediario nocturno sosteniendo un cartel que decía “Detened la guerra, no creáis la propaganda, aquí os mienten”. Fue acusada de menospreciar al ejército ruso y multada con 30.000 rublos (270 dólares en aquel momento).
Después de dejar su trabajo, Ovsyannikova se convirtió en una especie de activista, organizando piquetes contra la guerra y hablando en público contra el conflicto.
En las últimas semanas ha sido multada en dos ocasiones más por menospreciar al ejército en un post crítico en Facebook y por los comentarios que hizo en un tribunal donde el opositor Ilya Yashin estaba en prisión preventiva a la espera de juicio por difundir información falsa sobre el ejército.
Según Net Freedoms, un grupo de ayuda legal que se centra en casos de libertad de expresión, hasta el miércoles había 79 casos penales sobre cargos de difusión de información falsa sobre el ejército y hasta 4.000 casos administrativos sobre cargos de menosprecio de las fuerzas armadas.
En Rusia, los periodistas independientes son objeto de una vigilancia especial por parte del Kremlin. Un tribunal de Moscú multó el miércoles al periódico independiente ruso Novaya Gazeta con 350.000 rublos (5.700 dólares) por “abusar de la libertad de información de masas”. No estaba claro qué es lo que supuestamente hizo mal el periódico.
Desde que Putin llegó al poder, hace más de dos décadas, han muerto casi dos docenas de periodistas, entre ellos al menos cuatro que habían trabajado para Novaya Gazeta. El periódico cerró en marzo.
Su redactor jefe, Dmitry Muratov, ganó el año pasado el Premio Nobel de la Paz. En junio, subastó su premio para recaudar fondos para los niños ucranianos refugiados. La medalla de oro se vendió por 103,5 millones de dólares.