Una empresa de la zona de la bahía dice que la trabajadora y sus hijos fueron identificados como familia asesinada en Ucrania
Una empleada de una empresa tecnológica de Silicon Valley y sus dos hijos murieron en Ucrania cuando intentaban evacuar una localidad cercana a Kiev, según informó el lunes la empresa.
SE Ranking, una empresa de SEO en Palo Alto, publicó en Facebook el lunes que Tatiana Perebeinis, jefa de contabilidad de la empresa, y sus hijos, Alise y Nikita, fueron asesinados el domingo por fuerzas rusas de “artillería de mortero”. Aunque la empresa tiene su sede en Palo Alto, su LinkedIn muestra que muchos de sus empleados están basados en Ucrania.
Perebeinis y sus hijos trataban de huir de Irpin, un suburbio a unos 30 kilómetros al noroeste de Kiev que se quedó sin electricidad, calefacción y fuentes de agua, según la empresa.
Una inquietante foto tomada por un fotógrafo de Associated Press mostraba los cuerpos de Perebeinis y sus hijos en una calle de Irpin después de ser asesinados, con sus maletas al lado. Unos ocho civiles murieron por los bombardeos rusos en la ciudad de Irpin, según el alcalde Oleksander Markyshin. Las imágenes de vídeo mostraban cómo un proyectil se estrellaba contra una calle de la ciudad, no lejos de un puente utilizado por las personas que huían de los combates. Se puede ver a un grupo de combatientes intentando ayudar a la familia.
El presidente ucraniano, Volodymyr Zelenskyy, condenó los asesinatos y dijo en un discurso que castigará a las fuerzas que mataron a la familia. “No habrá un lugar tranquilo en la Tierra para ustedes”, dijo Zelenskyy. “Excepto la tumba”.
The New York Post informa de que el marido de Perebeinis, Sergey, se encuentra en la ciudad de Donetsk, pero está intentando viajar de vuelta a Kiev para enterrar a su familia. El Post también informa de que la familia estaba en Irpin para cuidar de la madre enferma de Perebeinis.
SE Ranking calificó al ejército ruso de “criminales” en su post, escribiendo que “no hay palabras para describir nuestra pena ni para reparar nuestro dolor.”
“Pero para nosotros es crucial no dejar que Tania y sus hijos Alise y Nikita sigan siendo sólo estadísticas”, escribió la empresa. “Su familia se convirtió en víctima del fuego no provocado contra civiles, lo que bajo cualquier ley es un crimen contra la humanidad”.
“Nuestros corazones están rotos”, concluye el mensaje de la compañía. “Nuestras oraciones son para todos los ucranianos, que luchan por su derecho a existir”.
The Associated Press contribuyó a este informe.