Las campanas de Ciudad del Cabo doblan en honor a la vida del Arzobispo Desmond Tutu
JOHANNESBURGO (AP) – Las campanas de la Catedral Anglicana de San Jorge, en Ciudad del Cabo, repicaron el lunes a mediodía en honor al arzobispo emérito Desmond Tutu, un día después de su muerte a los 90 años.
Las campanas de la catedral, donde Tutu instó a los sudafricanos de todas las razas a trabajar juntos contra el apartheid, tocarán durante 10 minutos al mediodía durante cinco días para conmemorar la vida de Tutu.
“Pedimos a todos los que escuchen las campanas que hagan una pausa en sus apretadas agendas para rendir homenaje al arzobispo Tutu”, dijo el actual arzobispo de Ciudad del Cabo, Thabo Makgoba.
El prelado activista trabajó contra el régimen del apartheid sudafricano que oprimía a la mayoría negra del país. Tras el fin del apartheid en 1994, cuando Sudáfrica se convirtió en una democracia, Tutu presidió la Comisión de la Verdad y la Reconciliación, que documentó las atrocidades y trató de promover la reconciliación nacional. Tutu también se convirtió en uno de los líderes religiosos más destacados del mundo en la defensa de los derechos LGBTQ.
Se han programado varios actos en Sudáfrica para honrar la vida de Tutu.
El cuerpo de Tutu reposará en la catedral de Ciudad del Cabo el viernes antes de que se celebre una misa de réquiem el sábado, dijo Makgoba. Además, el miércoles se celebrará un servicio ecuménico para Tutu en la capital de Sudáfrica, Pretoria.
Los sudafricanos están depositando flores en la catedral, frente a la casa de Tutu en la zona de Milnerton, en Ciudad del Cabo, y frente a su antigua casa en Soweto.
“Sabía en su alma que el bien triunfaría sobre el mal, que la justicia prevalecería sobre la iniquidad y que la reconciliación prevalecería sobre la venganza y la recriminación. Sabía que el apartheid terminaría, que la democracia llegaría”, dijo el presidente sudafricano Cyril Ramaphosa sobre Tutu, en un discurso transmitido a nivel nacional el domingo por la noche.
“Él sabía que nuestro pueblo sería libre. En la misma medida, estaba convencido, incluso hasta el final de su vida, de que la pobreza, el hambre y la miseria pueden ser derrotadas; que todas las personas pueden vivir juntas en paz, seguridad y comodidad”, dijo Ramaphosa, quien añadió que las banderas de Sudáfrica ondearán a media asta esta semana.
Ramaphosa instó a todos los sudafricanos a “presentar sus respetos a los difuntos y a celebrar la vida con la exuberancia y el propósito de nuestro querido arzobispo. Que sigamos sus pasos. Que nosotros también seamos dignos herederos del manto de servicio, de abnegación, de coraje y de solidaridad de principios con los pobres y marginados.”