KYIV, Ucrania (AP) – Una guardia de honor disparó una salva de tres cañonazos hacia el cielo nublado mientras amigos y compañeros de armas se reunían en Kyiv para despedir a una mujer rusa que murió mientras luchaba del lado de Ucrania en la guerra con su país natal.
Olga Simonova, de 34 años, fue recordada por su coraje y bondad en un funeral celebrado el viernes en la capital ucraniana.
El féretro de Simonova estaba envuelto en la bandera ucraniana azul y amarilla, con un león de peluche encima. Su nombre de guerra era “Simba”, como el personaje principal de los dibujos animados de Disney “El Rey León”.
Pocos días antes de que Rusia lanzara su invasión a gran escala de Ucrania el 24 de febrero, Simonova habló con The Associated Press en una trinchera en la región de Donbas, donde había servido durante años junto a los soldados ucranianos que luchaban contra los separatistas respaldados por Rusia.
Nacida en la ciudad rusa de Cheliábinsk, Simonova tenía un gran interés por los deportes y destacaba tanto en el alpinismo como en el karate. Decía que siempre estaba orgullosa de competir por Rusia.
Pero empezó a sentirse incómoda con su país natal después de leer sobre la guerra de Rusia en Chechenia y sus acciones en la región oriental ucraniana de Donbás y Crimea, que Rusia se anexionó en 2014.
Llena de dudas sobre si “podría volver a levantar la bandera de mi país, de mi patria”, Simonova tomó una decisión que cambió su vida. Viajó a Ucrania para unirse al conflicto del Donbás en el lado ucraniano, primero como combatiente voluntaria, luego como paramédica y finalmente como miembro alistado de las Fuerzas Armadas.
“Tenía esta sensación interna de que podía manejarlo y de que lo que estaba haciendo era correcto y necesario, porque no puedo hacer la vista gorda ante la situación”, dijo. “Sólo tenía que comprar un billete de ida. Lo compré y me fui”.
Simonova dijo que nunca ocultó su origen ruso a sus compañeros y que se ganó su confianza al mostrar su compromiso con Ucrania en el campo de batalla. En 2017 recibió la ciudadanía ucraniana.
Se convirtió en sargento y recibió el mando de unidades de infantería y artillería.
Amigos y colegas dijeron que Simonova, que era soltera y no tenía hijos, había sido redesplegada recientemente desde el este a la región sur de Kherson, donde Ucrania ha lanzado una contraofensiva contra las fuerzas rusas. Dijeron que murió el 13 de septiembre, después de que su vehículo chocara con una mina terrestre.
“Era respetada no sólo como comandante, sino como persona”, dijo Dmytro Karabinovskyi, su antiguo comandante y amigo.