Puede que no haya un rincón de San Francisco más atrapado en el tiempo que el cobertizo para botes en Stow Lake. Desde 1893, las parejas de enamorados y los niños emocionados han llevado botes de remos y botes de pedales al lago para observar tortugas, carpas tímidas y patos, o simplemente para perder unas […]Read More