Eventualmente perdí la cuenta de cuántas personas me recomendaron “El Oso”. Después de semanas de evitar el programa explosivamente popular, dejé que la presión de mis compañeros ganara y me alegré de haberlo hecho. Además, aunque la historia rayaba en la artificiosidad, lo compensaba con una actuación excepcional. Además, soy de Chicago, y aunque “The […]Read More