Cuando era niña, Claudia Fleming se burlaba de las pizzelles. La galleta italiana delgada como una oblea estuvo omnipresente en la infancia del pastelero, gracias a una abuela que pasaba horas todos los domingos presionando la masa pegajosa entre dos platos de metal estampados calientes hasta que era ancha como un platillo y delgada como […]Read More