Cuando era joven, si mi madre decía que íbamos a comer ensalada, probablemente se refería a una guarnición de hojas de lechuga iceberg rotas y gajos finos de tomates, aderezados con un chorrito de aceite vegetal y vinagre de vino tinto y espolvoreados con sal y pimienta. La recuerdo haciéndose ensaladas de tomate y cebolla […]Read More