El miércoles, el desprestigiado ex presidente George W. Bush -un hombre que ignoró las advertencias sobre el ataque del 11-S, lanzó una guerra mortal en Irak con falsos pretextos, destruyó la economía de Estados Unidos, fue rabiosamente homófobo y, de alguna manera, se ha rebautizado a sí mismo como un pintor extravagante- confesó finalmente sus crímenes.
“Aquí hay un clip extremadamente y escandalosamente real del ex presidente George W. Bush dando un discurso ayer donde discutió la invasión de Rusia a Ucrania y accidentalmente confesó ser un criminal de guerra”, explicó Late Night presentador Seth Meyers.
Sí, durante un evento en el que se exploró la “integridad electoral” en el Instituto George W. Bush de la Universidad Metodista del Sur en Dallas, el ex presidente dijo: “La decisión de un hombre de lanzar una invasión totalmente injustificada y brutal de Irak… me refiero a Ucrania.”
El desliz freudiano sobre una guerra de Bush que provocó más de un millón de iraquíes muertos y desestabilizó la región provocó, de alguna manera, grandes carcajadas entre los asistentes.
En cuanto a Meyers, le llevó a tomar un trago de whisky que había guardado bajo su escritorio antes de decir: “Estoy realmente seguro de que ese clip fue diseñado en un laboratorio para fundir los cerebros de cualquiera que estuviera vivo en 2003. Por aquel entonces, si hubieras llamado a la invasión de Irak ‘brutal’ e ‘injustificada’, la administración Bush y Fox News se habrían pasado una semana entera llamándote traidor, y cada vez que fueras al aeropuerto la TSA te habría hecho un registro completo de cavidades.” (Ver: The Dixie Chicks.)
Continuó: “Recuerden que esta fue una época de nuestra historia tan histérica e intolerante con la disidencia que la gente empezó a llamar a las patatas fritas “patatas de la libertad” porque Francia se oponía a la guerra, lo cual era tan mezquino como inútil”.
El comediante conectó entonces el GOP de la era Bush con la versión actual.
“Hay una línea directa desde Bush hasta el GOP moderno”, dijo Meyers. “El Partido Republicano de Trump es la evolución natural del Partido Republicano de Bush, que era anárquico y autoritario y utilizaba la histeria de la guerra cultural para despertar resentimientos y asustar a los votantes de la misma manera que lo hace ahora el Partido Republicano moderno. Sólo han cambiado de tema”.
Y, para que no lo olvidemos: Al igual que Trump, Bush consideraba al tirano ruso Vladimir Putin como un amigo y confidente, apodándolo “Pootie Poot” y dedicando una pared en su exposición de arte a retratos de Putin, incluyendo uno particularmente embarazoso de él sin camisa luchando con un oso.