Polonia revisa la seguridad tras el hallazgo de buzos cerca de un puerto clave
VARSOVIA, Polonia (AP) – El primer ministro de Polonia dijo el jueves que el país estaba revisando la supervisión de sus instalaciones de gas y petróleo y otros lugares estratégicos tras un incidente ocurrido el fin de semana en el que tres buzos extranjeros tuvieron que ser rescatados de cerca de un puerto petrolero clave donde no tenían autorización para estar.
El primer ministro Mateusz Morawiecki también dijo que había pedido a los servicios secretos de seguridad que elaboraran un informe detallado sobre el incidente.
La policía del norte de Polonia se enfrenta a preguntas sobre por qué liberó a los tres buzos rescatados cerca del puerto petrolero de Gdansk sin realizarles un interrogatorio detallado.
Expertos en seguridad afirman que la presencia de los buzos en la delicada zona del golfo de Gdansk el pasado fin de semana suscitó preocupación, dadas las fuertes tensiones con Rusia por sus entregas de energía. Los buzos llevaban documentos de identidad españoles.
Según los medios de comunicación polacos, los buceadores fueron rescatados a primera hora del domingo tras enviar un mensaje de socorro cuando su pequeña embarcación, sin matricular, se averió en medio de un temporal. Iban equipados con equipo de buceo profesional y dijeron que buscaban ámbar, pero no encontraron nada en la embarcación. No tenían permiso para bucear en el golfo.
A pesar del alto nivel de seguridad introducido en toda Polonia por el apoyo del país a la vecina Ucrania en medio de la invasión rusa, la policía liberó a los hombres. Eso ha suscitado dudas, más aún porque los números de teléfono que dieron resultaron estar inactivos.
Morawiecki, preguntado por el asunto, dijo que había encargado a los servicios secretos polacos que lo investigaran a fondo.
“Por supuesto, puede ser que se trate de gente peligrosa, pero puede resultar que no se trate de gente peligrosa y que lo que han declarado sea cierto”, dijo Morawiecki a los periodistas.
Destacó que Polonia había aumentado su nivel de supervisión de las infraestructuras estratégicas tras la invasión rusa de Ucrania el 24 de febrero, pero también está revisando de nuevo los protocolos de seguridad.
“Es obvio que en medio de la guerra en Ucrania, cuando el riesgo de sabotaje por parte de Rusia aumentó desmesuradamente, era necesario reforzar la supervisión de las infraestructuras críticas. También estamos revisando esta supervisión”, dijo Morawiecki.
Al plantear sus preocupaciones, los expertos apuntan a las explosiones submarinas que el verano pasado dañaron los gasoductos Nord Stream, que discurren por el fondo del mar Báltico e iban a transportar gas ruso a Alemania. Las autoridades suecas y danesas han dicho que las fugas fueron un sabotaje.
Algunos medios de comunicación polacos sugirieron que los tres buzos podrían estar implicados en una red de contrabando y que podrían haber estado buscando contrabando.