VARSOVIA, Polonia (AP) – Polonia retira a su nuevo embajador en Praga después de que éste criticara el enfoque del país en una disputa con la República Checa sobre una mina de carbón estatal.
El portavoz del gobierno polaco, Piotr Mueller, escribió en Twitter a última hora del jueves que los comentarios del embajador eran “extremadamente irresponsables” y que el proceso de retirada del diplomático estaba en marcha. Dijo que todos los diplomáticos deben proteger los intereses de Polonia.
En una entrevista publicada el jueves por la emisora alemana Deutsche Welle, el embajador Miroslaw Jasinski dijo que Polonia había mostrado una “falta de empatía, una falta de comprensión y una falta de voluntad para abrir un diálogo” con la República Checa.
La mina de lignito polaca está situada cerca de la frontera checa y las autoridades checas han dicho que afecta negativamente al medio ambiente y drena el agua de los pueblos locales.
Meses de conversaciones entre los ministros de Medio Ambiente checo y polaco no han resuelto la disputa, a pesar de las repetidas declaraciones del primer ministro polaco, Mateusz Morawiecki, de que un acuerdo estaba cerca.
Jasinski, que se convirtió en embajador de Polonia en la República Checa el mes pasado, culpó principalmente a la dirección de la mina por no haber resuelto el conflicto y haber permitido que se convirtiera en una disputa a nivel gubernamental.
“Seamos honestos y admitamos que, aún así, la razón de la disputa fue la arrogancia de algunas personas”, dijo Jasinski en su entrevista con Deutsche Welle.
“En primer lugar, de la dirección de la mina. Luego, de la dirección de (el gigante energético estatal) la PGE, y a años luz de ella están los ministerios y el primer ministro”, dijo Jasinski.
La mina también ha sido una fuente de tensión entre Polonia y la Unión Europea. En octubre, el Tribunal de Justicia de las Comunidades Europeas impuso a Polonia una multa de 500.000 euros (600.000 dólares) al día por no haber cumplido el requerimiento de mayo de cerrar la mina de Turow.
Al negarse a cerrar la inmensa mina a cielo abierto, el gobierno polaco ha argumentado que alimenta una central eléctrica que genera alrededor del 7% de la energía del país. Varsovia también se niega a pagar la multa, alegando que el tribunal de la UE no tenía autoridad para imponerla.
El nuevo gobierno checo pretende eliminar el carbón en la producción de energía para 2033 y aumentar la dependencia del país de la energía nuclear y las fuentes renovables.
Polonia, que depende del carbón para casi el 70% de su generación de energía y unos 80.000 puestos de trabajo, dice que necesita una eliminación lenta y ha fijado su fecha objetivo para 2049.