SKOPJE, Macedonia del Norte (AP) – Los líderes de la Unión Europea y de Estados Unidos instan al parlamento de Macedonia del Norte a aceptar una propuesta francesa que acercará al pequeño país balcánico a la adhesión a la UE y a superar las objeciones de Bulgaria.
“En este momento crítico de la historia europea, marcado por la injustificable agresión llevada a cabo por Rusia contra Ucrania, avanzar en el camino de Albania y Macedonia del Norte hacia la UE es clave para reforzar la cohesión y la resistencia de todo el continente europeo”, dijeron el sábado en una declaración conjunta el jefe de la política exterior de la UE, Josep Borrell, y el secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken.
“Acogemos con satisfacción una propuesta de compromiso que tiene en cuenta los intereses y preocupaciones tanto de Macedonia del Norte como de Bulgaria, basada en el respeto, la confianza y el entendimiento mutuos. La decisión soberana del Parlamento de Macedonia del Norte será importante para avanzar”, dijeron.
“La Unión Europea y los Estados Unidos están comprometidos con una cooperación más estrecha en los Balcanes Occidentales. Garantizar la estabilidad y la prosperidad y hacer realidad su futuro europeo y euroatlántico sigue siendo nuestro objetivo común”, añadieron.
Macedonia del Norte es candidata a la adhesión a la UE desde hace 17 años. El país recibió luz verde para iniciar las conversaciones de adhesión en 2020, pero no se ha fijado una fecha para el inicio de las negociaciones.
Bulgaria ha utilizado su poder como miembro de la UE para bloquear la adhesión de Macedonia del Norte.
Las tensiones políticas en Macedonia del Norte han ido en aumento con violentas protestas nocturnas desde que el presidente francés Emmanuel Macron anunció en la cumbre de la OTAN en Madrid que creía que se había alcanzado “una solución de compromiso”.
La propuesta de Macron contempla concesiones de ambas partes. El gobierno de Skopje se comprometería a cambiar su constitución para reconocer una minoría búlgara, proteger los derechos de las minorías y prohibir la incitación al odio, como ha exigido Bulgaria, miembro de la UE desde 2007.
El dirigente francés destacó que la propuesta no cuestiona la existencia oficial de una lengua macedonia, pero señaló que, como todos los acuerdos, “se basa en compromisos y en un equilibrio”.
En Macedonia del Norte, tanto el Presidente Stevo Pendarovski como el gobierno del Primer Ministro Dimitar Kovacevski respaldaron la propuesta como un compromiso razonable. Aceptarla “no será ni un triunfo histórico, como diría un bando, ni un fracaso o debacle histórico, como dicen los del otro bando”, dijo Pendarovski.
El gobierno ha subrayado que la propuesta no pone en peligro los intereses o la identidad nacional. Pero el principal partido de la oposición de centro-derecha, el VMRO-DPMNE, así como otros, no están de acuerdo, diciendo que el acuerdo favorece las demandas búlgaras que cuestionan la historia, la lengua, la identidad, la cultura y el patrimonio de Macedonia del Norte.
En Bulgaria, el gobierno centrista del primer ministro Kiril Petkov fue derrocado en una votación de censura el 22 de junio. Un socio de gobierno menor abandonó la frágil coalición cuatripartita, describiendo la voluntad de Petkov de levantar el veto a Macedonia del Norte como una “traición nacional”.
Bulgaria ha aceptado la propuesta francesa, que ahora requiere el respaldo del Parlamento de Macedonia del Norte. Todavía no se ha programado una sesión plenaria.