La reacción racista de los “anillos de poder” es más del mismo alarmismo de la teoría del reemplazo

 La reacción racista de los “anillos de poder” es más del mismo alarmismo de la teoría del reemplazo

Parece que los derechistas racistas han encontrado una nueva fantasía épica con la que obsesionarse.

Hace unos meses, los supremacistas blancos encontraron muchas cosas que les gustaban en El Hombre del Norteuna película sobre un vikingo que busca venganza por la muerte de su padre. El director Robert Eggers dijo que la “apropiación indebida por parte de la derecha” de la cultura vikinga casi le hizo desistir del proyecto en primer lugar, pero eso no impidió que esas mismas personas aplaudieran el reparto totalmente blanco y los reconfortantes valores de la mitología escandinava que Eggers sirvió en su película.

Alentados por los temores sobre la “teoría del reemplazo”, estos incitadores al odio han puesto ahora sus ojos en la nueva serie de Amazon Prime El Señor de los Anillos: Los Anillos del Poder. Salvo que no están tan contentos con lo que ven en pantalla.

La serie ha contratado a varias personas de color para los papeles principales, un movimiento que tiene que ver tanto con la mejora de la representación en Hollywood como con la fidelidad al material original de J.R.R. Tolkien, que describe a los harfoots, una raza de hobbits de la Tierra Media, como “de piel más morena”. Pero el casting se extiende a otras especies de la Tierra Media: El actor puertorriqueño Ismael Cruz Córdova interpreta al guerrero elfo Arondir, mientras que Sophia Nomvete, de ascendencia sudafricana e iraní, interpreta a la primera mujer y enana negra que se ve en cualquier adaptación de la obra de Tolkien. En una entrevista con Esquire publicada la semana pasada, Córdova reveló que ha recibido “discursos de odio puro y duro” en las redes sociales durante los dos últimos años tras conseguir el papel.

No hace falta mirar sus mensajes de texto para comprobarlo. El odio está a la vista de todo el mundo en Internet, con los llamados fans de la fantasía quejándose de que Amazon está pisoteando su cultura al permitir que los fans no blancos se vean reflejados en un mundo imaginario.

Un usuario de Twitter comparó el casting de Córdova con la idea de hacer una “Pantera Blanca”. Incluso Elon Musk acudió a Twitter para opinar que Tolkien “se está revolviendo en su tumba”.

Los anillos del poder se ha convertido posteriormente en objeto de un “bombardeo de críticas” -en el que los trolls hunden los programas de televisión y las películas que no les gustan inundando Internet con críticas negativas- que ha llevado a Amazon a poner en pausa todas las críticas en la página de la serie. Hasta ahora, el 25% de las críticas de los usuarios son de una estrella, algunas de las cuales no son más que comentarios racistas y poco claros sobre el reparto de la serie. “No es Tolkien. No son los personajes de Tolkien. No son los temas de Tolkien”, escribió un crítico. Otro dijo: “Hay tanta política y desviación de la obra original de Tolkien que me resulta difícil incluso seguirla” (una valoración confusa, teniendo en cuenta la ambientación de la serie -en una tierra ficticia miles de años antes de los acontecimientos del original El Señor de los Anillos y El Hobbit-no permite mucho espacio para la política moderna).

La reacción ha sido tan fuerte que ha provocado una respuesta de la cuenta de Instagram de la serie, que se vio obligada a reconocer las crecientes críticas el miércoles.

“Nosotros, el elenco de Rings of Power, nos unimos en absoluta solidaridad y contra el implacable racismo, las amenazas, el acoso y el abuso al que son sometidos a diario algunos de nuestros compañeros de reparto de color”, decía en parte el comunicado del programa. “Nos negamos a ignorarlo o tolerarlo”.

Ese mismo día, Elijah Wood, que protagonizó a Frodo en la trilogía cinematográfica de Peter Jackson, publicó una foto junto a su LOTR coprotagonistas Dominic Monaghan y Billy Boyd. En la foto, los antiguos hobbits posan con camisetas en las que se puede leer “Todos sois bienvenidos aquí”, escrito en la lengua élfica de ficción por encima de las orejas de los hobbits de diferentes tonos de piel.

Es poco probable que estas declaraciones de apoyo -de Hollywood, nada menos- hagan cambiar de opinión a nadie. Escribir para The Conversation, la profesora de la Universidad de Deakin Helen Young dice que no es sorprendente que los fanáticos intolerantes y afines hayan encontrado una causa en Los Anillos del Poder. Cita a Craig Franson, investigador de Tolkien, quien argumenta que los fascistas abiertamente racistas están movilizando a una base que incluye una prensa voraz de derechas y derechistas crédulos para atacar cualquier pieza de entretenimiento que se atreva a manchar la línea de sangre blanca pura de sus personajes con gente de color, incluso si la raza no se menciona específicamente en el material original.

Young señala además una larga historia de la extrema derechafascinación por Tolkien. En la década de 1970, escribe Young, los fascistas italianos organizaron un festival del Campamento Hobbit basado en los libros para promover sus ideas políticas. Y aunque Tolkien hablaba con sorna de Adolf Hitler, al mismo tiempo exaltaba el significado de la “suprema contribución a Europa” y el “noble espíritu del Norte” -ideas que pueden haberse filtrado en su escritura y que siguen alimentando los rincones más oscuros de su base de fans.

La conmoción por Los anillos del poder es solo el último escándalo relacionado con el casting impregnado de conservadurismo post-Trump, en el que los derechistas intentan controlar el discurso, normalmente centrando sus argumentos en cómo la izquierda está intentando borrar o demonizar a los blancos, los hombres o los heterosexuales.

Vimos lo mismo después de que la actriz y cantante negra Halle Bailey sufriera ataques racistas al ser elegida para el papel de Ariel en el próximo remake de acción real de Disney de La Sirenita. También le ocurrió a Leah Jeffries, que fue elegida para interpretar a Annabeth Chase en la serie de Disney+ Percy Jackson y los OlímpicosLos comentarios sobre su papel fueron tan brutales que Rick Riordan, autor de la serie original, tuvo que salir en su defensa. Y Moses Ingram fue criticada de forma muy parecida por su papel de inquisidora cazadora de jedis en la reciente serie de Disney+ Obi-Wan Kenobi.

A pesar de la reacción, Amazon dice Los anillos del poder atrajo a la friolera de 25 millones de espectadores en su primer día. La serie también cuenta con una calificación del 71% en Metacritic y del 84% en Rotten Tomatoes, lo que la convierte en un éxito comercial y de crítica.

Related post