Kanye West ha optado una vez más por alinearse con Marilyn Manson, sacando al rockero de choque al escenario durante su Donda 2 evento de escucha en el LoanDepot Park de Miami el martes por la noche.
Parece un movimiento descarado por parte de West para suscitar algo de controversia -o sea, titulares- para el evento, ya que fue justamente amonestado por incluir a Manson en su anterior álbum Donda‘s “Jail Pt. 2” durante el verano, ignorando voluntariamente que había sido golpeado con un aluvión de graves acusaciones de abuso el pasado mes de febrero.
Las antiguas parejas del cantante, entre ellas la actriz Evan Rachel Wood y Juego de Tronos‘ Esme Bianco, acusaron a Manson de violación, agresión sexual, tortura, violencia física y abuso emocional. Y después de que al menos cuatro mujeres se manifestaran, los antiguos ayudantes de Manson y compañeros de la industria respaldaron sus afirmaciones o alegaron que también fueron objeto de algunos de los mismos abusos. (Manson ha negado continuamente las acusaciones; actualmente está siendo investigado por los supuestos abusos y se enfrenta a cuatro demandas civiles).
Tras las acusaciones, Manson se desvinculó rápidamente de su discográfica y se retiró en gran medida de la opinión pública, aparentemente con la esperanza de capear la tormenta mediática. Eso fue hasta que West decidió intervenirle para un reportaje en Donda-un álbum que lleva el nombre de la difunta y querida madre de West, la doctora Donda West, que murió tras una chapuza de cirugía estética en 2007. West también ha traído a Manson, que ya había sido acogido en los brazos de la Iglesia de Satán, a sus servicios dominicales y lo ha presentado en su Donda evento de escucha en Chicago.
Pero para el concierto del martes, que se retrasó casi dos horas, no había necesidad inmediata de que West invitara a Manson o al rapero DaBaby -que se vio envuelto en su propia controversia por despotricar de forma homofóbica durante el verano-, ya que su canción “Jail Pt. 2” ni siquiera aparece en Donda 2.
West es un orgulloso partidario de Donald Trump, que ha sido acusado de conducta sexual inapropiada por más de 2o mujeres, y él mismo ha sido un crítico vocal del movimiento #MeToo, diciendo de las acusaciones contra Manson en un podcast reciente, “Te golpearán con las acusaciones o alguien con quien estuviste hace 10 años. Y además, hay mujeres que han pasado por cosas muy graves, arrastradas a callejones en contra de su voluntad; eso es diferente a un abrazo, pero se clasifica como lo mismo. Es poder y política. Ya sabes, maníacos hambrientos de poder y sólo control. Esto es 1984 control mental en el que estamos”.
Ni Manson ni DaBaby actuaron en directo, sino que ambos permanecieron sin rumbo en un charco de agua frente a la iglesia quemada del escenario, mientras su canción sonaba por los altavoces del estadio.