Elon Musk, consejero delegado de Tesla (y posible comprador de Twitter), ha lanzado un ultimátum enojoso a sus empleados de oficina: trabajar 40 horas a la semana en la oficina o renunciar.
El mandato fue enviado por primera vez en un correo electrónico, que fue filtrado por el inversor de Tesla Sam Nissim, el martes por la tarde al listserv “ExecStaff” de la compañía.
“Cualquier persona que desee hacer el trabajo a distancia debe estar en la oficina por un mínimo (y quiero decir *mínimo*) de 40 horas por semana o salir de Tesla,” dijo Musk en el correo electrónico. “Esto es menos de lo que pedimos a los trabajadores de la fábrica”.
Sí que deja un mínimo margen de maniobra para los “colaboradores excepcionales para los que esto es imposible”, señalando que tiene que “revisar y aprobar” cualquier empleado remoto él mismo.
En un correo electrónico de seguimiento a todos los empleados, Reuters informóreiteró esta exigencia, e hizo su advertencia aún más explícita. “Si no te presentas, asumiremos que has dimitido”, dice el correo electrónico obtenido por Reuters.
Ese correo electrónico continúa: “Tesla ha creado y creará y realmente fabricará los productos más emocionantes y significativos de cualquier empresa en la Tierra. Esto no sucederá si se hace por teléfono”.
Musk no confirmó la autenticidad de ninguna de las dos cartas. Pero en respuesta a lo que un usuario de Twitter denominó “gente que piensa que venir a trabajar es un concepto anticuado”, Musk tuiteó, “Deberían fingir que trabajan en otro sitio”.
El multimillonario divisivo no se anduvo con rodeos a la hora de hablar de cómo deberían trabajar los empleados en la oficina.
“Además, la ‘oficina’ debe ser una oficina principal de Tesla, no una sucursal remota sin relación con las funciones del trabajo, por ejemplo, ser responsable de las relaciones humanas de la fábrica de Fremont, pero tener su oficina en otro estado”, dijo en la carta filtrada por Nissim.
Con estas salvas internas, Musk se ha adelantado a la creciente tendencia del trabajo a distancia. Salesforce, Meta y otras grandes empresas tecnológicas han fomentado una cultura de trabajo a distancia en todo Silicon Valley – con la excepción clave de Apple, que ha empujado a los empleados a venir a pesar de las renuncias de alto perfil y los murmullos de descontento.
Dicho esto, esta noticia puede no ser un buen augurio para los empleados de Twitter -que han recibido permiso para trabajar a distancia- si la adquisición de Musk tiene éxito.