NUEVA DELHI (AP) – Dos jueces del máximo tribunal de la India discreparon el jueves sobre la prohibición del uso del hijab, un pañuelo utilizado por las mujeres musulmanas, en las instituciones educativas y remitieron la delicada cuestión a un tribunal más amplio de tres o más jueces para resolverla.
Los jueces Hemant Gupta y Sudhanshu Dhulia emitieron un fallo dividido tras escuchar las peticiones presentadas por un grupo de musulmanes contra la sentencia de un tribunal superior del estado de Karnataka. El tribunal estatal se había negado a suspender una orden gubernamental emitida en febrero que prohibía a las personas vestirse con prendas que perturben la igualdad, la integridad y el orden público en las escuelas y colegios.
El ministro de Educación del estado de Karnataka, B.C. Nagesh, dijo el jueves que la prohibición de llevar el hijab en los centros educativos del estado continuará hasta que el máximo tribunal resuelva la cuestión de si el pañuelo musulmán es una práctica religiosa esencial en el Islam.
La disputa comenzó a principios de este año, cuando una escuela gestionada por el gobierno en el distrito de Udupi, en Karnataka, prohibió a las alumnas que llevaban hiyab entrar en las aulas, lo que desencadenó las protestas de los musulmanes, que dijeron que se les estaba privando de sus derechos fundamentales a la educación y la religión.
Los estudiantes hindúes lanzaron contraprotestas llevando chales de color azafrán, un color estrechamente asociado a esa religión y favorecido por los nacionalistas hindúes.
Otros centros educativos del estado impusieron prohibiciones similares y el Tribunal Superior del Estado prohibió a los alumnos llevar el hijab y cualquier otra prenda religiosa. Los grupos musulmanes recurrieron al Tribunal Supremo contra la prohibición.
El jueves, el juez Gupta del Tribunal Supremo dijo que había una opinión divergente y que el asunto debía remitirse a un tribunal más amplio de más de dos jueces. Desestimó el recurso de los grupos musulmanes contra la orden del gobierno.
Sin embargo, el juez Dhulia dijo que no era necesario aventurarse en una práctica religiosa esencial y que el tribunal superior del estado había tomado el camino equivocado. “Era sólo una cuestión de elección. Para mí, lo más importante era la educación de un niño”, dijo.
Durante los argumentos, los demandantes insistieron en que impedir que las niñas musulmanas lleven el hijab en las aulas pondría en peligro su educación, ya que podrían dejar de asistir a la escuela.
El gobierno estatal, sin embargo, alegó que su orden de prohibir el hiyab en las aulas era “neutral desde el punto de vista religioso”.
La prohibición del estado de Karnataka no se extiende a otros estados indios, pero la sentencia del Tribunal Supremo podría sentar un precedente para el resto del país.
La violencia y los discursos de odio contra los musulmanes han aumentado bajo el partido nacionalista hindú del primer ministro Narendra Modi, que también gobierna el estado de Karnataka.
Los musulmanes, que representan el 14% de los casi 1.400 millones de habitantes de la India, temen ser apartados como una minoría en el país y consideran que la prohibición del hiyab es una preocupante escalada del nacionalismo hindú bajo el gobierno de Modi.
Algunos activistas por los derechos han expresado su preocupación por que la prohibición pueda aumentar la islamofobia.