LA HAYA, Países Bajos (AP) – El gobierno holandés se disculpó formalmente el sábado con los soldados que fueron enviados como fuerzas de paz de la ONU para defender el enclave bosnio de Srebrenica sin contar con suficiente potencia de fuego y personal para mantener la paz.
Los soldados -ya veteranos- fueron arrollados por fuerzas serbobosnias más armadas, dirigidas por el general Ratko Mladic, que masacraron a 8.000 hombres y niños musulmanes en julio de 1995, en un baño de sangre que un tribunal internacional de crímenes de guerra calificó de genocidio.
El Primer Ministro Mark Rutte se dirigió el sábado a cientos de veteranos de la unidad de mantenimiento de la paz Dutchbat III en una base militar en el centro de Holanda, diciéndoles que después de casi 27 años “algunas palabras aún no se han dicho”.
“Hoy pido disculpas en nombre del gobierno holandés a todas las mujeres y hombres del Dutchbat III. A ustedes y a las personas que no pueden estar hoy aquí. Con el mayor aprecio y respeto posibles por la forma en que el Dutchbat III, en circunstancias difíciles, siguió intentando hacer el bien, incluso cuando eso ya no era posible”, dijo Rutte.
La ceremonia tuvo lugar después de que el año pasado se publicara un informe sobre las experiencias de los aproximadamente 850 soldados que componían el Dutchbat III. El estudio hacía recomendaciones, entre ellas que el gobierno hiciera un “gesto colectivo” para abordar lo que llamaba “la falta de reconocimiento y aprecio percibidos, dadas las circunstancias excepcionales en las que se ha pedido lo casi imposible” a las fuerzas de paz holandesas.
Los Países Bajos han luchado durante mucho tiempo con el legado de la masacre de Srebrenica. El entonces Primer Ministro, Wim Kok, dimitió en 2002 después de que un informe criticara duramente a las autoridades holandesas por enviar soldados a una zona de peligro sin un mandato adecuado ni las armas necesarias para proteger a unos 30.000 refugiados que habían huido a la base holandesa en el este de Bosnia.
En 2019, el Tribunal Supremo holandés dictaminó que Holanda era parcialmente responsable de la muerte de unos 350 hombres musulmanes asesinados por las fuerzas serbobosnias durante la masacre.
El tribunal dictaminó que las fuerzas de paz holandesas evacuaron a los hombres de su base militar cerca de Srebrenica el 13 de julio de 1995, a pesar de saber que “estaban en grave peligro de ser abusados y asesinados” por las fuerzas serbobosnias.
La ONU también ha sido criticada por no autorizar los ataques aéreos de la OTAN para apoyar a las tropas holandesas ligeramente armadas en julio de 1995 cuando fueron atacadas.