MIAMI (AP) – El asediado ex jefe de policía de Miami está demandando a su antiguo empleador y a los comisionados de la ciudad, diciendo que su despido público hace tres meses fue una represalia por haber denunciado la corrupción.
Art Acevedo estuvo seis meses en el cargo y fue suspendido y luego despedido después de tres reuniones estridentes, en las que dice que fue “humillado a propósito” y despedido por denunciar los abusos de poder de los funcionarios elegidos.
La demanda fue presentada el miércoles en un tribunal federal contra la ciudad de Miami, su administrador municipal Art Noriega y tres comisionados de la ciudad.
La demanda dice que un memorándum enviado al alcalde y al administrador de la ciudad en el que se acusa a varios comisionados de obstaculizar su reforma y de entrometerse en el departamento de policía debería haber estado protegido por la Primera Enmienda, pero en cambio le costó su trabajo. Dice que su despido violó la Ley de Denuncias de Florida, que protege a los empleados contra las represalias por denunciar abusos de poder.
La queja dice que Acevedo estaba preocupado porque dos comisionados estaban tratando de enviar a la policía para la aplicación del código a bares y restaurantes específicos propiedad de un hombre que había apoyado a un oponente político.
Intentó “hacer retroceder los intentos de ciertos comisionados de la ciudad de Miami de utilizar a los hombres, mujeres y recursos del MPD para llevar a cabo sus agendas personales y utilizar al (Departamento de Policía de Miami) como su marioneta”, dice la denuncia.
Incluye detalles sobre la primera reunión pública en la que se discutió el mandato de Acevedo, cuando los comisionados reprodujeron vídeos en los que se le veía imitando a Elvis Presley con un mono blanco bailando el “Jailhouse Rock” en una recaudación de fondos previa a su puesto en Miami. Intentaron “humillarle”, dice la denuncia.
La ciudad de Miami no respondió inmediatamente a las solicitudes de comentarios.
Acevedo fue contratado por el alcalde de Miami, Francis Suárez. En ese momento, se le promocionaba como un agente de la ley progresista que había dirigido el departamento de policía en Houston y que compartía ascendencia con cientos de miles de cubanos en Miami como refugiado nacido en La Habana.
Pero Acevedo comenzó a hacer olas casi inmediatamente después de comenzar en el puesto el pasado mes de abril al hacerse cargo de los asuntos internos y hacer cambios significativos en su personal de mando. Degradó a cuatro comandantes y despidió a dos oficiales de policía de alto nivel -un matrimonio- porque no fueron sinceros sobre un accidente en el que estaba involucrado un todoterreno de la ciudad.