SAN FRANCISCO (AP) – Un halcón peregrino cuya pareja de muchos años murió esta semana en plena temporada de cría parece haber encontrado un nuevo compañero que le ayude a incubar dos huevos.
Grinnell, una de las queridas parejas de halcones peregrinos que durante mucho tiempo tuvieron su hogar en lo alto del campanario de la Universidad de California en Berkeley, fue encontrado muerto el jueves. Menos de 24 horas después, su compañera Annie se había apareado con un nuevo halcón macho no marcado, dijo el viernes en Twitter Cal Falcons, un grupo que vigila a las aves.
“Cuando un halcón apareado muere durante la temporada de cría, el resultado más probable del nido es el abandono”, tuiteó Cal Falcons. “En raros casos, una nueva pareja puede llegar, establecer un vínculo con el individuo restante y adoptar a los polluelos”.
Aunque los halcones peregrinos suelen emparejarse de por vida, los que pierden a su pareja buscan un sustituto tras la muerte de ésta.
El nuevo halcón también parecía interesado en incubar los huevos de Annie y realizó múltiples demostraciones de cortejo con Annie después de pasar la noche en su nido de grava, dijo el grupo.
“Aunque es posible que estos dos huevos no lleguen a buen puerto, se trata de un avance alentador”, dijeron. “Estaremos atentos a las entregas de presas y a la incubación en particular, ya que esos dos comportamientos serán una indicación de un nido potencialmente exitoso”.
Grinnell fue encontrado muerto en una calle y probablemente fue atropellado por un coche, dijo el grupo. Grinnell y Annie habían estado anidando en lo alto del Campanile de 307 pies de altura de la universidad desde finales de 2016 y produjeron 13 polluelos.
Grinnell fue atacado por otros halcones el pasado otoño y pasó casi tres semanas en un hospital de fauna salvaje recuperándose, mientras otros rivales cortejaban a Annie. Pero regresó y los observadores sintieron que la pareja volvía a unirse.
Unas horas antes de morir, Grinnell fue visto defendiendo el nido contra otro halcón peregrino. Cal Falcons dijo que es posible que el nuevo halcón sea con el que luchó Grinnell, aunque una lesión en la pata izquierda del ave parece ser más antigua.
En febrero, Annie desapareció de su nido y se presumió brevemente que estaba herida o muerta antes de regresar casi una semana después. Su desaparición llegó a los titulares locales.
Los investigadores de los halcones dijeron que nunca habían visto a una hembra desvanecerse repentinamente durante la temporada alta de cría y luego regresar repentinamente.
Los halcones peregrinos son considerados las aves más rápidas del mundo. Pueden alcanzar las 200 millas por hora (322 kilómetros por hora) durante un picado de caza conocido como stoop. Estas aves americanas fueron declaradas en peligro de extinción en 1970 por ingerir presas envenenadas con DDT y otros pesticidas. La sustancia química hizo que los halcones produjeran huevos de cáscara fina que no podían sobrevivir hasta la eclosión. Sin embargo, los programas de recuperación sacaron al ave de su potencial extinción.