Detectada una fuga en el oleoducto que lleva el petróleo ruso a Alemania
VARSOVIA, Polonia (AP) – Se ha detectado una fuga en un oleoducto subterráneo de Polonia que es la principal vía por la que el crudo ruso llega a Alemania, según informó el miércoles el operador polaco.
El operador, PERN, dijo que detectó una fuga en el oleoducto Druzhba el martes por la noche a unos 70 kilómetros (45 millas) de la ciudad central polaca de Plock.
Se desconoce la causa de la fuga. El incidente se produce después de que a finales del mes pasado se produjeran fugas en los gasoductos Nord Stream 1 y 2 que discurren por el fondo marino del Báltico, y en medio de un enfrentamiento energético entre Rusia y Occidente.
Un funcionario de seguridad del gobierno polaco, Stanislaw Zaryn, dijo que la fuga podría ser el resultado de un accidente, pero que las autoridades seguían investigando y estudiando otras posibles explicaciones.
“Son posibles diferentes escenarios. No excluimos ninguna de ellas”, dijo a The Associated Press.
El oleoducto Druzhba, que en ruso significa “Amistad”, es uno de los más largos del mundo y, tras salir de Rusia, se ramifica para llevar el crudo a puntos como Bielorrusia, Ucrania, Polonia, Hungría, Austria y Alemania.
Los bomberos estaban trabajando en los campos de maíz cercanos a la localidad de Zurawice para determinar el punto exacto de la fuga, según un portavoz de los bomberos, el brigadista Karol Kierzkowski. El portavoz de los bomberos, el brigadier Karol Kierzkowski, declaró a la emisora estatal de noticias TVP Info que se habían bombeado unos 400 metros cúbicos de crudo derramado y que se había bloqueado la transmisión a lo largo de la línea.
El Ministerio de Economía alemán afirmó que los suministros de Berlín están actualmente asegurados, y que dos refinerías alemanas siguen recibiendo suministros a través del oleoducto de Druzhba. Dijo que las reservas en esas dos refinerías se han incrementado en las últimas semanas, y que ambas pueden, en caso de necesidad, abastecerse a través del puerto alemán de Rostock y del puerto polaco de Gdansk.
El año pasado, Rusia representaba alrededor del 35% del suministro de crudo de Alemania. Pero esa proporción se ha reducido tras la invasión de Ucrania por parte de Moscú, y el objetivo de Alemania es ahora eliminar progresivamente los suministros restantes antes de que entre en vigor un embargo de la Unión Europea sobre la mayoría de las importaciones rusas.
Hace un mes, el gobierno alemán tomó el control de tres refinerías propiedad de la empresa energética rusa Rosneft, que representan alrededor del 12% de la capacidad de refinado de petróleo de Alemania.